Tipos de estrías según su estadio de desarrollo
La primera diferenciación que se puede establecer entre los diferentes tipos de estrías es la de su estadio de desarrollo.
Así, existen estrías rojas, blancas e hiperpigmentadas que te detallamos a continuación.
Estrías rojas o rubra
Las estrías rojas o rubra son las más recientes y se encuentran en su fase inicial o inflamatoria.
Son de color rojo, rosado o violáceo porque todavía presentan una vascularización. Pueden venir acompañadas de picores o sensación de quemazón.
Son las que mejor responden a tratamientos no invasivos como cremas específicas o el láser vascular.
Estrías alba
Las estrías alba son las que se encuentran en un estadio de evolución más desarrollado y han pasado a una fase cicatricial.
Son de color blanco nacarado, sin vascularización por lo que resultan mucho más complicadas de eliminar.
En este caso es necesario recurrir a tratamientos más intensos como los peelings químicos o el láser fraccional, sabiendo que su completa eliminación es complicada.
Estrías hiperpigmentadas
Las estrías hiperpigmentadas evolucionan a partir de las estrías rubra cuando no se tratan. Son características de pieles oscuras o negras, con fototipos elevados.
Se muestran de un color más oscuro que el de la piel que las rodea, en vez de volverse blancas como ocurre con las alba. Pueden ser marrones, grises o violetas.
Tipos de estrías según la causa
La segunda ordenación de las estrías puede hacerse con base a las causas, con lo que obtenemos los 3 tipos de estrías siguientes.
Estrías de la pubertad
Las estrías de la pubertad surgen como consecuencia de los cambios hormonales y corporales en la adolescencia. Se trata modificaciones corporales que son tan rápidas que no permiten que la piel se adapte a ellas, y, al estirarse, rompe las fibras de elastina y colágeno.
Por este motivo surgen las estrías en muslos, espalda baja, brazos, etc.
En un principio, son estrías rojas o rosadas y, como te hemos avanzado, han de tratarse a tiempo para evitar que pasen a la fase de cicatrización.
Estrías de distensión
Las estrías de distensión surgen por un estiramiento mecánico de la piel causado por un aumento corporal importante que puede ser provocado por la obesidad o por un crecimiento rápido del músculo (también llamadas estrías musculares o atróficas), por ejemplo.
Asimismo, los tratamientos intensivos con corticoides pueden debilitar la estructura dérmica favoreciendo la aparición de este tipo de estrías.
Pueden surgir en cualquier momento de la vida y suelen localizarse en zonas en las que se suele acumular la grasa como el abdomen, las caderas, los muslos o la parte superior de los brazos.
Estrías gravídicas
Las estrías gravídicas son las que pueden aparecer en el embarazo, principalmente en la zona abdominal, alrededor del ombligo, muslos y pecho por los cambios hormonales y corporales en esta etapa de la vida de la mujer.
La producción de hormonas como los glucocorticoides hace que la piel de la embarazada sea más propensa a desarrollar estas marcas.
En este caso, aunque a veces es inevitable su aparición, puedes evitarlas o atenuarlas con tratamientos hidratantes y nutritivos que favorecen la elasticidad de la piel.
Cada tipo de estría responde a ciertos tipos de tratamientos según su fase de desarrollo y características cutáneas específicas.
Tratamientos para cada tipo de estría
Ahora que ya conoces los diferentes tipos de estrías, vamos a profundizar en algunos de los tratamientos recomendados por expertos en dermatología consultados.
Tratamientos estrías rojas
Como te hemos avanzado, estas estrías son las que mejor responden a los tratamientos al encontrarse en su fase inicial.
Algunas de las soluciones a las que puedes recurrir se centran en estimular la producción de colágeno y elastina, favorecer la renovación cutánea y exfoliar las capas superficiales de la piel para mejorar la textura de la estría.
Por lo tanto, la mesoterapia puede ser una opción. Esta técnica infiltra principios activos a la piel propiciando su regeneración. Otros tratamientos pueden ser el láser vascular, la microdermoabrasión o los peelings químicos.
Las formulaciones dermoestéticas son grandes aliadas para combatir las estrías rojas, como las soluciones ricas en retinoides que inducen el recambio cutáneo.
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Una de sus grandes ventajas es que es apta en el embarazo y la lactancia, por lo que puedes tratar las estrías gravídicas.
Su fórmula está enfocada a prevenir y reducir la aparición de las marcas en la piel, gracias a su exclusivo complejo natural formado por los Péptidos Pal- GQPR y Pal- GHK, que actúan directamente sobre los fibroblastos, regenerando la matriz celular y estimulando la síntesis de colágeno. También incorpora un potente antioxidante Rutina y extracto de semillas de Phaseolus Lunatus (Green bean) que inhiben a las enzimas Tripsina y Quimiotripsina, principales responsables de la formación de las estrías al romper las fibras de colágeno y elastina.
Tratamientos estrías blancas
Dado el estado avanzado de las estrías blancas, es preciso recurrir a tratamientos de mayor intensidad para alcanzar las capas más profundas de la piel como:
- Radiofrecuencia. Genera calor en las capas profundas de la piel estimulando la producción de colágeno y elastina.
- Láser ablativo. Se sirve de una longitud de onda de luz muy intensa que elimina la capa externa de la piel y calienta la dermis favoreciendo el crecimiento de nuevas fibras de colágeno.
- Microneedling. Consiste en microperforaciones en la piel que buscan regenerar las estrías más profundas.
- Biodermogénesis. Combina micropeelings con calor y principios activos beneficiosos para el tratamiento de las estrías cicatrizadas.
Tratamientos estrías hiperpigmentadas
En el caso de las estrías hiperpigmentadas, lo que se busca es atenuar su color al mismo tiempo que debe estimularse, como en los casos anteriores, la síntesis de colágeno y elastina.
Por esta razón los peelings químicos despigmentantes con ingredientes como el ácido glicólico o mandélico suelen dar buenos resultados.